Ya pasó un mes desde que el Senador
Nacional Luis Juez visitara San Juan y compartiera con los vecinos de Pocito
unas horas y una bandera emblemática por estos tiempos. La “literatura” oficial
no ha parado desde entonces.
Que
les molesta tanto?


Qué
les molesta tanto? Que los vecinos tengan las puertas abiertas al Congreso
Nacional a través del diputado Mauricio Ibarra y sobre todo a través de los
bloques del FAP (Frente Amplio Progresista) en ambas cámaras.
Qué
les molesta tanto? La cantidad y la calidad de la información que maneja la
Asamblea de Vecinos y/o la capacidad de hacerla llegar a todo San Juan, a pesar
de los escasos recursos y del “silenciador” oficial.
Qué
les molesta tanto? El apoyo de todos los que escuchan las razones por las que
es incompatible e inconveniente la instalación en Pocito de esta industria
calificada como CONTAMINANTE en todas las latitudes de este planeta?
Lo
que fundamentalmente les molesta tanto es que TANTA VERDAD esté del lado de los
Vecinos.
Lo
que realmente les molesta tanto es que la causa sea TAN JUSTA.
Lo
que ciertamente les molesta tanto es que sean TAN BUENOS los argumentos para
pedir la relocalización.
Lo
que les molesta tanto es que es TAN POCO lo que tienen para ofrecer.
La
Asamblea de Vecinos en Defensa del Cerro se encontró con la oportunidad de
detectar un error, proyectar la instalación de la Megacementera en Pocito es un
grave error. La determinación de la Asamblea es hacérselo ver a quienes están
tomando las decisiones: entiéndase Loma Negra y gobierno.
En
la escuela todos aprendemos que si nos equivocamos nos desaprueban o nos
amonestan.
En
el vecindario los que se equivocan… bueno depende del tamaño del error… si éste
es tan grande hay dos opciones: o no te admiten o te echan de la vecindad.
En
democracia pasa algo similar, las personas son elegidas mediante el voto o no,
los candidatos son premiados o castigados. La vanidad sufre demasiado con el
castigo.
Estamos
convencidos que todavía estamos a tiempo para corregir este error, para
enderezar el rumbo. Estamos a tiempo de
dejar de lado los compromisos que se hayan adquirido con los intereses empresarios,
ya sea a cambio de convenientes negocios o a cambio de importantes apoyos
futuros. Estamos a tiempo para estar del lado de los intereses del pueblo, de
la gente, de los ciudadanos, de los habitantes, de los vecinos, de la verdad.
Los
que están tomando decisiones por todos nosotros están a tiempo de rectificar y
mantener los laureles, o al menos de CONSULTAR y soportar las espinas.
Los
que estamos “padeciendo” esas decisiones siempre tendremos oportunidades para
aceptar o rechazar a nuestros vecinos, para premiar o castigar a nuestros
gobernantes, para entregar laureles o espinas. Lo que es seguro, es que no
dejaremos pasar esta oportunidad de estar unidos y organizados para exigir
nuestros derechos y decidir sobre nuestro futuro.
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